Welcome!

Te invito a que te des un garbeo por este territorio fronterizo, donde encontrarás algunas cosillas mías, las de otros y tal vez algunas tuyas, si quieres. Además, también iré colgando algunas de las cosas que despierten mi curiosidad, confirmen o desafíen mi pensamiento y mis creencias, o me generen algún cosquilleoCuando te apetezca acompañarme, ten a mano los auriculares, sobretodo si quieres escuchar bien los mélanges (sorry, pero en ese tema no he aprendido nada nuevo). Y si no visualizas bien la página, cambia la resolución de tu pantalla a 1280 x 1024. Hala pues!, sírvete un drink, unas almendritas o prende un cigarrillo, y pincha el gadget, que esto despega ya...

Aquí el Mix: Una altra galaxia (Pastora)© + Apolo XI.
Aquí el video y la letra en castellano
"Lo que uno ya es incapaz de contar con el cuerpo y el espíritu termina contándolo con la música" S.Marai

29 junio 2014

25 junio 2014

Adiós a la Matute

Sarajevo 1914 (2). La volatilidad de los príncipes


"Sarajevo ya no es una ciudad multiétnica; sólo el 1% de sus habitantes es cristiano"

Cuando usted vuelva quizá ya no existamos".

Slavitza Radovic relata su soledad sobre el águila de los reyes de Serbia tejida en una gran alfombra.

-Sólo el 1% de los habitantes de Sarajevo es cristiano -dice.

Slavitza vende cajitas y bordados frente a la vieja iglesia ortodoxa de los Santos Arcángeles Miguel y Gabriel: suya es la única tienda serbia y cirílica en el corazón islámico de Sarajevo.

-Sarajevo ya no es una ciudad multiétnica... ¿No me quería preguntar algo de Gavrilo Princip?

Los equilibrios identitarios marcaron el segundo día en Sarajevo del heredero del imperio austrohúngaro y su esposa, el 26 de junio de 1914, hoy hace cien años. Francisco Fernando salió hacia Tarcin para dirigir unas maniobras militares y Sofía visitó a todos los dioses de la ciudad.

Sarajevo 1914 (1). 'Una lágrima en el ojo de Serbia'


La Primera Guerra Mundial empezó con amor.

A las tres de la tarde del 25 de junio de 1914, hoy hace cien años, Sofía Chotek esperaba a su esposo en un andén de Sarajevo. Había llegado unas horas antes: Bosnia era un viaje de cierto riesgo y ella quería estar a su lado.

Estaba casada con un tipo sin demasiada gracia. Sobrino del emperador, Francisco Fernando era heredero del imperio austro-húngaro por descarte. Maximiliano, hermano pequeño del emperador, fue ejecutado en México. Rodolfo, el hijo, se suicidó en Mayerling. Carlos Luis, hermano mediano, murió de tifus al beber agua del río Jordán... El siguiente en la lista era él.

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19 junio 2014

Desmarcar Barcelona. Marina Garcés

Te recomiendo mucho esta interesantísima charla que dio la filósofa Marina Garcés el pasado mes de mayo en el CCCB.

 ¿Qué desafíos plantea hoy la experiencia del turismo de masas? ¿Cómo abordar la relación entre turismo y espacio público sin sentir la “marca Barcelona” en la piel? Sin caer en el esnobismo y el elitismo de la crítica fácil al turista, la filósofa Marina Garcés se propone vincular el análisis del turismo al paradigma económico del extractivismo, el modelo de crecimiento capitalista que consiste en la explotación de los recursos comunes de un lugar hasta agotarlos. Normalmente, se aplica al contexto de los actuales países emergentes y a su explotación de los recursos energéticos y naturales, pero ¿y si nuestro extractivismo es el turismo? Tres serían los caminos posibles: la fuga desbocada hacia delante, el desarrollo sostenible o el decrecimiento. Según Marina Garcés, Barcelona aún está atrapada en la primera vía. El reto es hoy desmarcar la ciudad: que Barcelona se desmarque del capitalismo desbocado, y que los barceloneses nos arranquemos la marca que llevamos tatuada en la piel.

03 junio 2014

Sarajevo, la Jerusalén de Europa

Republicado de El Diario del Viajero

Sarajevo es la capital de Bosnia-Hercegovina y es una de las pocas ciudades europeas donde conviven pacíficamente musulmanes, católicos, ortodoxos y judíos. Por eso a Sarajevo se la llama, la “Jerusalén de Europa”, ya que esta convivencia es la que normalmente se atribuye a la ciudad israelita de las tres religiones.
Aunque inicialmente se trataba de una ciudadela eslava, pronto pasó a formar parte del Imperio Turco. Los turcos fueron los responsables de toda la región antigua de la ciudad, de edificios bajos y puestos de madera. Precisamente a los turcos les debe su mezquita más antigua, y su nombre derivado de Bosna-Saraj. Llegó a ser la segunda ciudad más importante del imperio otomano después de Estambul, y la más importante de toda la región de los Balcanes.
La zona turca de la ciudad es para mí la más atractiva. Cuando la visité, estaba repleta de puestos donde se vendían alfombras, especias, ropa, carne, fruta y cualquier otra cosa que os podáis imaginar, recordándome cualquier bazar o mercado árabe. Las calles son muy estrechas, y es muy fácil perderse, pero en contra de lo que piensa mucha gente, la ciudad te transmite sensación de ser muy segura.
En plena zona turca, se pueden encontrar bares turcos, similares a las teterías, donde no se puede beber alcohol y se fuma la cachimba o shisha; también hay bares convencionales. Esto puede daros una idea de las mezclas raciales que hay. Puedes ver por ejemplo, una mujer de raza típicamente eslava con el velo musulmán, o una mujer de rasgos musulmanes con ropa europea. 
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02 junio 2014

La casa rota


Homs (Siria)

Saber perder

 Republicado de disfuncionalA

Ya sé que es el título de una novela de David Trueba… pero él tampoco murió de originalidad…
La cosa es que parece que es lo único que he aprendido con los años. A perder.
Juegos de llaves, calcetines, nivel adquisitivo, citas en el médico, aviones, memoria, fotos, los papeles… los papeles de verdad, los de papel…
He perdido el contacto con gente querida, la costumbre de querer por contacto, las agendas, las tarjetas, los discos, los guantes, los dueños de los números de las agendas, de los nombres de las tarjetas, de los discos y de los guantes…
Y, perdiendo, he aprendido a perder hasta cuando no es sin querer.
He perdido a novios que me querían tanto que me aburrían, a otros que me querían tan poco que se aburrieron de mí, a otros que me querían tan mal que nunca nos aburrimos, a amantes pasajeros que lo fueron tanto que parecieron pasantes, a mujeres que me ofrecieron un viaje a Lesbos, que acepté cuando ya era demasiado tarde, a hombres que querían pasar, o amar, pero que se me perdieron antes…
He perdido las ganas de que fuera para siempre, la fe en que durara hasta el día siguiente, la fe en tener ganas, las ganas de ser creyente…
Lo he perdido todo. He perdido tanto, que he dejado de llamar a objetos perdidos.
Ya tienen mi número…